Crece la incertidumbre sobre el futuro de los 800,000 jóvenes indocumentados que gozan del alivio migratorio temporal conocido como DACA, ya que la Administración Trump podría anunciar antes del 5 de septiembre su cancelación, fecha límite para hacerlo impuesta por varios fiscales estatales que exigen anularla o reactivarán una demanda contra el Gobierno Federal.

El principal impulsor de la revocación de este beneficio migratorio es el procurador general de Texas, Ken Paxton, quien amenazó al fiscal general del país, Jeff Sessions, con una acción legal si el DACA sigue vigente. Paxton exige la anulación paulatina de esta orden ejecutiva aprobada en 2012 por el expresidente Barack Obama. Por esta razón, activistas y organizaciones proinmigrantes de todo el país piden a los ‘dreamers’ no viajar al extranjero hasta que se defina la situación del DACA. También recomiendan a quienes están pensando solicitar por primera vez la renovación del DACA, que presenten la solicitud antes del 5 de septiembre, para no perder los 495 dólares que es el costo de la aplicación, en caso la Acción Diferida sea cancelada.