Lobos aúllan en la costa
Marlon Gomez | 8/10/2017, midnight
El equipo de Kyle se une a la GCPLS
Todo comenzó en el 2015, reclutando jugadores en el área de San Marcos, Kyle y el Condado Hays, para el Zuzeca Affiliated Soccer Clubs. Así nació una oncena sin nombre, que por poco tiempo fue conocida como ‘el equipo de San Marcos’ y que, gracias a pasos firmes, se convirtió en una fiera en los campos de fútbol.
Su nombre le hace honor a su pasión por el fútbol: Central Texas Lobos, club que debutó oficialmente en el año 2016 en la Texas Premier Soccer League (TPSL).
En su primera temporada, el equipo logró el título de la Texas Cup, con la que ganaron también el honor y la responsabilidad de representar a la liga en la prestigiosa ‘Lamar Hunt US Cup’.
Dispuestos a crecer, Lobos dio otro paso para desarrollarse como equipo profesional, abandonando la TPSL para unirse a la Gulf Coast Premier League Soccer (GCPLS), liga interestatal que cuenta con la participación de equipos de Louisiana, Alabama, del noroeste de Florida, Georgia, de Mississippi y ahora de Texas.
“Este es el único estado de la costa del Golfo que no estaba representado en la GCPLS. Estamos emocionados de poder representar a Texas, para demostrar que tenemos jugadores talentosos esperando mostrar toda su capacidad en una liga de gran proyección como la GCPL”, comenta para El Mundo Newspaper, David Walding, director de los Central Texas Lobos.
En esta liga, el equipo tendrá actividad en partidos amistosos y en torneos especiales, pero deberá esperar hasta el 2018 para participar en la temporada regular.
El Central Texas Lobos también funciona como academia juvenil. Recientemente iniciaron el entrenamiento con mujeres para crear un equipo femenino. Poco a poco, los Lobos toman fuerza y crecen como institución deportiva para ser el punto de referencia del fútbol texano.
“Comenzamos a prepararnos para un nivel más alto de juego en el 2015 e hicimos el movimiento al nivel Premier del estado. Nos esforzamos por ser un club profesional dirigido a desarrollar el talento local, sin importar la nacionalidad del jugador ni su condición social”, concluye Walding.