Los terribles ataques de ansiedad
REDACCION EL MUNDO | 8/3/2017, midnight
Cualquier persona puede estar preparándose para ir a dormir y de repente, sin motivo aparente, todo cambia. Comienzan las palpitaciones, la sensación de falta de aire y el miedo irracional, entre otros síntomas. Probablemente, esa persona haya sufrido un ataque de pánico o una crisis de ansiedad. Los síntomas de un ataque de ansiedad son muy típicos y muy violentos, muy súbitos, intensos y rápidos y producen mucho malestar. En muy poco tiempo, quienes padecen de un ataque de ansiedad sentirán palpitaciones, taquicardia, falta de aire y opresión en el pecho. Otros síntomas que pueden aparecer son la sensación de inestabilidad o el miedo a perder el conocimiento. Por otro lado, además de los síntomas físicos, puede aparecer la sensación de que las cosas no son reales.
En estas crisis se dan, principalmente, cuando la persona está sometida a un estrés continuo. Los problemas económicos, por ejemplo, pueden aumentar el riesgo. Sin embargo, hay otros factores que las complican. Cuando los pacientes los sufren tienen la percepción de estar enfermos físicamente. Algunos llegan a creer que su vida está en peligro y sufren de un infarto.
Cualquiera puede sufrir una crisis aislada. Sin embargo, si las crisis se repiten, hay que hacer algo al respecto. Los pasos que tiene que dar una persona que ya sabe que está pasando por una crisis de ansiedad son realizar técnicas de relajación, intentar no centrarse en el problema y buscar ayuda, ya sea comunicándose con otras personas o simplemente contar con su compañía.