En primer lugar, son amigos. La clave de una relación amorosa exitosa es iniciarla con un lazo fuerte y equilibrado. Las parejas que comparten una amistad profunda terminaban más satisfechas con sus niveles de sexo, romance y pasión.

No tienen hijos. Nadie dijo que tener hijos era fácil y según un estudio de la Universidad de Princeton, el hecho de no tener hijos influye directamente en que una pareja sea, a la larga, más feliz. Los investigadores descubrieron que las parejas sin hijos eran más felices, sin estar casados. Y en cuanto a las parejas con hijos, será un plus trabajar en lugares que ofrezcan horarios flexibles.

El sueño es necesario para estar sanos física y mentalmente, pero también es un factor importante en una relación. Un estudio hecho en la Universidad de Arizona descubrió que las mujeres que dormían mal, tenían más problemas en su matrimonio que aquellas que dormían al menos 8 horas al día.

Celebrar también es muy importante para la pareja. No importa qué tomen, sino la forma y el momento en que lo hagan, lo cual tiene un gran impacto en los niveles de felicidad de la relación. Si la pareja tiene hábitos completamente diferentes con respecto al alcohol, es muy posible que éstos los separen.

Finalmente, hay muchos beneficios de tener intimidad con tu galán, pero una de las mejores son los niveles de felicidad individuales y en pareja.

Un estudio de la Universidad de Colorado descubrió que las parejas que tenían sexo al menos tres veces al mes, eran 33% más felices. AGENCIAS