Cambio de aires
Donald Trump ganó la presidencia gracias a la masiva votación de quienes piden un cambio a la política económica y social actual
Angela M. Angulo | 11/10/2016, midnight
Tras una larga noche, en la que el país confrontó su historia moderna y sus valores, y el recuento más angustiante de las últimas décadas, Donald Trump ganó la presidencia de la Nación más poderosa del mundo. Y aunque las elecciones concluyeron la madrugada del 9 de noviembre, un nuevo proceso acaba de empezar. El candidato Trump insistió en controvertidas propuestas para solucionar diversos temas de interés nacional que quizá sean difíciles de materializar como presidente.
La propuesta más atractiva para sus votantes fue aquella promesa de subir el salario mínimo a 10 dólares por hora. Al declarar por primera vez como presidente electo, Trump ya adelantó sus planes de construir carreteras, puentes, hospitales y escuelas en todo el país. Trump también anunció su intención de renegociar los términos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), suscrito con México y Canadá, o de lo contrario su gobierno abandonará el acuerdo. También prometió que la clase media y las empresas pagarán menos impuestos y que revitalizará la industria nacional para crear empleos en territorio estadounidense.
Otras afirmaciones que ganaron el respaldo de millones de votantes fue su rechazo a los cambios legislativos que tiendan a restringir el derecho a la tenencia de armas. También manifestó su furibundo desprecio por el ‘ObamaCare’, que reemplazará (eso prometió) con cuentas de ahorro para la salud personal, además de promover reformas de libre mercado en el sector salud para reducir costos. Y sobre la pena de muerte dijo estar a favor y considera que el delito de matar a un policía merece la pena capital automática (algo que podría aprobar el Congreso de la Unión, controlado totalmente por los republicanos).
En estas elecciones, Trump contó con el respaldo masivo de los evangelistas, a pesar de que el magnate aseguró en campaña que respetará la decisión de la Corte Suprema sobre matrimonio igualitario, aunque preferiría que cada estado establezca sus propias leyes al respecto.
Además, el ahora presidente republicano dijo en campaña estar a favor de penalizar el aborto excepto en casos de violación, incesto o riesgo para la salud de la madre. Recordemos también que cuando Trump fue propietario del concurso Miss Universo, tomó una decisión liberal e histórica al permitir, sin ningún problema, la participación de la transexual Jenna Talackova, candidata canadiense en 2012.
En el tema migratorio, Trump repitió muchas veces que los inmigrantes son una carga para el país. En sus mítines propuso endurecer la legislación, cancelar el DACA, triplicar el número de oficiales del ICE y construir un muro en la frontera con México (obligando a que ese país pague por él). Los primeros objetivos de las deportaciones prometidas serían los ‘dreamers’ y los refugiados sirios. También podría cancelar la Ley de Ajuste Cubano (beneficio migratorio conocido como ‘pies secos, pies mojados’ para inmigrantes cubanos).
Sus propuestas para la política exterior serán las primeras en cambiar. Trump ha declarado que Estados Unidos no debe comprometerse en luchas ajenas a sus intereses y que sólo debe hacerlo cuando pueda garantizarse la victoria a través del envío de tropas. Hacer efectiva esa idea dejaría sin aliados a Estados Unidos en lugares geopolíticos estratégicos, por lo que el Congreso se opondría a semejante plan. Para agudizar la preocupación, Trump ha dicho que ‘sería maravilloso llevarse bien con Rusia’, ya que una buena relación bilateral con ese país podría ser más efectiva en la lucha contra el Estado Islámico. Recordemos que el ahora presidente dijo saber cómo vencer a ese grupo terrorista, y que pondría manos a la obra de ser electo. Y a propósito la amenaza terrorista, Trump prometió que prohibirá la entrada temporal de musulmanes a Estados Unidos. También establecerá mejores métodos de interrogatorio a los sospechosos de terrorismo (para Trump, el método ‘submarino’ es aceptable).
Finalmente, respecto del cambio climático, Donald Trump considera que éste es un mito inventado por los chinos. ¿Y sobre el uso de la marihuana? Permitirá su uso médico, mas no la legalizará bajo leyes federales.