Afines del 2015, la compañía Vivalnk creó un termómetro en forma de parche que busca solucionar la angustia de los padres al saber si sus hijos tienen fiebre o no. Obtener esta información es posible aunque ellos estén en casa o en el trabajo, cuando no pueden monitorear a sus pequeños.

El parche termómetro también será de gran utilidad cuando el bebé esté enfermo, ya que evita tener que tomar la temperatura a cada momento.

Bajo el nombre comercial de The Fever Scout, el parche se pega con una cinta segura al torso del bebé. Una aplicación instalada en el teléfono recibirá notificaciones de la temperatura registrada para que los padres puedan suministrar la medicación necesaria o en su defecto llevarlo al doctor cuando presenten fiebre.

La aplicación permite ver el historial de los momentos en que el niño tuvo fiebre y así analizar si el medicamento hizo efecto o no.

El niño tendrá puesto el termómetro por uno o dos días continuamente, después de esto se lo despegará del cuerpo para recargar la batería en el dispositivo USB que viene con el producto. Cabe aclarar que la compañía dice que puede funcionar hasta una semana con una sola carga. Se recarga al 100% en dos horas aproximadamente.

El parche

El diseñador comentó que querían que este termómetro no luciera como algo típicamente “médico”, es por eso que le dieron una forma de zigzag con colores para hacerlo más divertido, algo que a la vez facilita el poder pegarlo al cuerpo.

Otro llamativo detalle es que de acuerdo a la temperatura corporal el parche ira cambiando de color.

Al cierre de esta edición no se ha confirmado su distribución en farmacias, pero está a la venta en la web. El producto incluye el parche, cargador, 10 cintas adhesivas y el permiso para el uso de la aplicación en los teléfonos inteligentes; por ahora sólo disponible para iPhone y en septiembre será lanzado para Android 2016.