Abortar es un derecho en Texas
Activistas celebraron en Austin la decisión de la Corte Suprema que acabó con las restricciones del aborto en el ‘Estado de la Estrella Solitaria’
6/30/2016, midnight
Varias organizaciones civiles, activistas y defensoras del aborto en Austin y alrededores se reunieron el pasado lunes 27 de junio para celebrar la decisión de la Corte Suprema que reafirmó el derecho a practicarse un aborto que tienen las mujeres al anular las restricciones que tenían las clínicas especializadas en esta práctica. “Esta es una victoria de todos, se trata de respetar los derechos que tenemos todos”, declaró Rockie Gonzalez, representante de la organización La Frontera Fund.
En un emotivo evento celebrado en el Scholz Garten (1607 San Jacinto Blvd.) y organizado por Whole Woman’s Health -en el que también participaron Planned Parenthood of Texas, Fund Texas Choice, La Frontera Fund (Del Valle), entre otras agrupaciones- se congregaron más de 200 personas, incluido un representante del Condado Travis, para manifestar su apoyo al derecho pleno de las mujeres que viven en Texas.
“Me parece magnífico, es una decisión razonable. La idea de que todo esto (restringir el derecho a optar por el aborto) haya sido sólo para proteger la salud de la mujer eran tan absurda que hasta la Corte Suprema se dio cuenta”, comentó Margot Clarke (62), activista y residente de Austin.
DEBE SABERLO
En Estados Unidos abortar es legal desde el año 1973. Sin embargo, distintas iniciativas han intentado desafiar su legalidad o limitarla. La normativa vigente asegura que los Estados de la Unión pueden establecer restricciones, con tal de que no representen un obstáculo sustancial para que una mujer pueda abortar.
Es importante recordar que la ley HB2 (aprobada en 2013) obligaba a las clínicas texanas especializadas en la interrupción del embarazo a disponer de un bloque quirúrgico digno de un hospital. Además, la citada ley obligaba a los médicos que realizan abortos a disponer de una autorización anticipada de admisión de sus pacientes en un hospital local. Esas disposiciones eran para ‘minimizar’ los riesgos sanitarios, según los redactores de la HB2.
Normas tan estrictas obligaron a cerrar, en dos años, decenas de clínicas. Y optar por este servicio, de por sí bastante desgarrador, era más doloroso ya que las mujeres debían viajar varias decenas de millas para encontrar un centro que las atienda.
Estas regulaciones resultaron altamente demandantes para las pequeñas clínicas, causando con el tiempo el cierre de varios centros en Texas. Haciendo el uso de estos servicios una misión imposible para las mujeres de Texas viéndose en la necesidad de viajar hasta 85 millas para encontrar una clínica, y en casos extremos buscar los servicios de clínicas clandestinas.
“Aún hay mucho por hacer. Hoy celebramos, pero mañana seguiremos en la batalla. Las clínicas no se abrirán de la noche a la mañana”, dijo la representante de Whole Woman’s Health. Para Nathalie Sinclair, gerente de operaciones de Fund Texas Choices, la decisión de la Corte Suprema evitará que muchas mujeres tengan que viajar muy lejos de su hogar al momento de optar por el aborto.
Leslie Mitch, corresponsal de Planned Parenthood, pidió a la comunidad registrarse y votar en las elecciones de noviembre pensando en los derechos de la mujer: “La única manera en que podemos detener legislaciones como ésta es si dejamos de elegir legisladores que piensan en nefastas, desagradables e inconstitucionales legislaciones”.
El fallo de la Corte Suprema trascenderá las fronteras texanas, ya que optar por el aborto se ha convertido en una práctica cada vez más complicada para millones de mujeres que viven en territorio estadounidense.