Greg Hamilton, actual Sheriff del Condado Travis, no se presentará a la reelección, lo cual abre una posibilidad para que la Demócrata Sally Hernández ocupe un puesto que sólo dos mujeres han ejercido desde la fundación de este condado en 1,840. A Hernández la respaldan sus 34 años de experiencia trabajando en distintos cuerpos de seguridad en Texas. Sabe de qué se trata el cargo y las necesidades urgentes que se deben afrontar, como la recuperación de la confianza de la población inmigrante.

“El actual programa de detención y deportación no nos ayuda a ofrecer seguridad a nuestra comunidad ni a asegurar que todas las personas sean tratadas de forma igualitaria. La actual alianza con el ICE terminará cuando sea Sheriff”, asegura Sally Hernández, a quien le espera una larga campaña que concluirá en noviembre. Con ella conversamos.

– ¿Por qué decidió competir para Sheriff?

– En el pasado nunca me imaginé ser candidata a ningún cargo, pero cuando decidí ser candidata a ‘constable’ lo hice porque quise ponerle diversidad a la oficina de alguaciles del condado y restaurar la confianza de la comunidad. Lo hemos logrado en el Precinto 3, haciendo algunos cambios internos y saliendo a la calle a estar en contacto con nuestra comunidad. Cuando el actual Sheriff dijo que no se lanzaría para la reelección este año, y viendo los retos que enfrentamos actualmente los cuerpos de seguridad, pensé que esta es una gran oportunidad para recuperar la confianza de todo el condado.

– ¿Cómo logró que los vecinos del Precinto 3 recuperaran la confianza en los cuerpos de seguridad?

– Saliendo a la calle. Como ‘constable’ estamos involucrados en procesos civiles e infracciones menores, así que nos metemos de lleno en estos procesos, pero también abrimos un departamento de alcance comunitario con el cual implementamos programas como prevención de embarazos adolescentes, prevención de violencia, atención a los adultos mayores y vigilancias comunitarias. La gente dejó de vernos como el brazo de la ley y ahora nos ven como parte de la comunidad.

– También habla de cambios internos, ¿Puede señalar alguno?

– Cuando recién fui electa ‘constable’ en el 2012 sucedió el lamentable tiroteo en College Station (Este de Austin) donde un oficial fue asesinado. A raíz del incidente, el Departamento de Policía de College Station hizo un entrenamiento en el que se destacó lo que se había hecho bien al manejar la situación, pero también lo que se había hecho mal. Me di cuenta que esa era una gran técnica y una gran oportunidad para hacer lo mismo en diferentes instituciones. Reunimos a 34 agencias de policía del Centro de Texas y dictamos un entrenamiento. Nuestros oficiales se involucraron en entrenamientos en otras instituciones.

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