La Corte Suprema aceptó estudiar el caso de los alivios migratorios del Presidente Barack Obama, trabados en los tribunales por casi un año a raíz de una demanda de 26 Estados de la Unión que buscan eliminarlos, para lo cual realizará audiencias en abril y emitirá un dictamen definitivo en junio de este año. La Casa Blanca expresó confianza en que el máximo ente de justicia del país permitirá su puesta en marcha.

Los alivios migratorios beneficiarían a cinco millones de inmigrantes indocumentados, e implican la extensión del programa de “Acción Diferida” (DACA) del 2012 y uno similar para adultos con hijos ciudadanos o residentes legales, conocido por su sigla en inglés “DAPA“.

Estas medidas protegen temporalmente de la deportación a quienes reúnan los requisitos para ambos programas, que además tendrían acceso a permisos de trabajo y, según el estado en el que vivan, licencias de conducir. AGENCIAS