Fútbol europeo se solidariza con inmigrantes
Dentro y fuera de las canchas, público, clubes y jugadores no son ajenos al drama que se vive en el Mediterráneo
9/10/2015, midnight
Decenas de miles de inmigrantes dejan atrás los horrores de la guerra atravesando las fronteras europeas. En medio de una crisis migratoria que no tiene comparación en las últimas décadas, el fútbol abrió una puerta.
El Bayern Munich y el Real Madrid donaron poco más de un millón de dólares cada uno para apoyar a los miles de inmigrantes que huyen de la guerra en Siria y países vecinos. El Borussia Dortmund decidió invitar a 220 refugiados a su estadio como señal de bienvenida y el Porto propuso a todos los equipos donar dinero de las recaudaciones de los partidos de Champions League para ayudar a los inmigrantes que huyen de la violencia.
EL DATO
Alemania espera la llegada récord de 80 mil solicitudes de asilo este año, más que cualquier otro país de la Unión Europea y el cuádruple que en el 2014. La mayoría proviene de Siria, seguido por Eritrea y Afganistán.
Individualmente, las dos súper estrellas del fútbol mundial, Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, tampoco son indiferentes a la ola de solidaridad que se contagia día tras día en Europa. Ambos se pronunciaron en sendos comunicados, pidiendo una solución a la crisis migratoria en el Mediterráneo. Sergio Ramos, uno de los emblemas del Real Madrid, promueve una campaña de recolección de fondos para los refugiados en su condición de embajador de buena voluntad de Unicef.
Y el equipo blanco puso a disposición del gobierno español algunas de las infraestructuras que posee el club y material deportivo para ayudar con la asimilación de cientos de personas.
Por otra parte, el director general del Bayern Munich, Karl-Heinz Rummenigge, anunció que su club pondrá a disposición un campamento en el que los muchachos de las divisiones inferiores brindarán clases de alemán y comida a los inmigrantes. Es importante destacar que la migración es un factor presente en el combinado alemán. Entre los seleccionados figuran futbolistas nacidos fuera de las fronteras alemanas como Lukas Podolski (Polonia), o cuyas familias llegaron desde distintos puntos del planeta, como Özil, Gündogan y Emre Can (Turquía); Boateng (Ghana) y Shkodran Mustafi (Albania).
El fútbol, tantas veces manchado por los mensajes racistas que bajan desde algunas graderías, demuestra su rostro más solidario al brindar un poco de su inmenso poder económico y mediático sumándose a la bienvenida europea a los inmigrantes de Oriente Medio. AGENCIAS
