El aumento en el total de homicidios en la mayoría de las principales ciudades de este país ha encendido alarmas del Gobierno Federal, ya que la tendencia actual se presenta luego de que una serie de tiroteos de gran repercusión mediática que condujeron a una brecha entre la Policía y sus comunidades, y colocaron las tácticas policiales bajo un escrutinio extraordinario.

Si continúa el repunte de este crimen, amenaza con desviar recursos de otras iniciativas del Departamento de Policía y revertir algunos de los progresos que las ciudades han hecho en contra del crimen violento durante las últimas dos décadas.

No hay una explicación sencilla para el problema. Algunos lo atribuyen al fácil acceso a drogas y armas. Algunos expertos también creen que la tasa de homicidios había llegado a niveles tan bajos que no era razonable esperar que ese declive continuara. AGENCIAS