Un reciente estudio del Texas Policy Evaluation Project (TxPEP) determinó que aproximadamente el 1.7% de mujeres que han abortado en el estado trataron de inducirse la pérdida del bebé por sí mismas.

Aunque suene como un porcentaje bajo, el estudio indica que la cifra, considerando la población de Texas, habla de entre 100 mil y 240 mil mujeres. Este número corresponde sólo al período comprendido entre el 2013, cuando entró en vigencia la ley que restringe los abortos en el estado, y la actualidad.

De acuerdo a la investigación, los ‘métodos caseros’ más comunes incluyen tés, hierbas y medicamentos obtenidos en México sin prescripción. La Corte Suprema de Justicia evaluará la constitucionalidad de la Ley Antiaborto de Texas antes del verano del 2016.