Lentes, lentillas o gafas… no importa como les digas, todos son lo mismo: un accesorio que complementa el estilo y que protegen nuestros ojos.

Su historia se remonta al siglo XII en Asia, cuando se ahumaban los cristales de cuarzo para ocultar las expresiones durante los juicios de la China antigua.

Pero fue hasta 1929 cuando se comenzaron a comercializar las gafas de sol en Estados Unidos. Hoy en día son casi imprescindibles, tanto para hombres como mujeres. De hecho, cada temporada surgen nuevas tendencias y a veces nos vemos tentados a sumarnos a ellas, pero no siempre es esa la mejor opción.

Por ejemplo, las lentes azules y violetas suelen ser más una decoración del rostro. Su protección solar es mínima.

Si quieres saber más sobre cómos los colores te protegen y qué forma te conviene más, sigue leyendo esta pequeña guía.

Gama de opciones

Las verdes: permiten percibir los colores sin apenas alteraciones. Reduce la luz visible sin interferir en la claridad de la visión. Esta opción es adecuada para cualquier actividad, pero especialmente recomendable para personas con hipermetropía.

Las naranjas: éste es el color más adecuado en condiciones de baja luminosidad, como la conducción nocturna o con niebla, ya que aumenta los niveles de contraste, sin embargo no es apto para el uso solar.

Las polarizadas: eliminan los reflejos horizontales que pueden llegarnos del agua o el asfalto, evitando el deslumbramiento.

Las café: filtran las radiaciones azules y aumenta el contraste y la profundidad de campo. Por ello es el color más indicado para los miopes o para la práctica de deportes al aire libre.

Las amarillas: no son recomendables para conducir en días soleados, ya que puede provocar errores en la percepción de las luces de los semáforos. Sin embargo, mejora el contraste en días nubosos, brumosos y con niebla.

Las grises: transmiten uniformemente la luz a través del espectro y respetan mejor los colores naturales. Esta es la razón por la que es la mejor opción para conducir un coche.

Las fotocromáticas: se oscurecen en presencia de luz y se aclaran en la oscuridad, al igual que las lentes espejadas, están especialmente recomendadas para practicar deportes náuticos y en ambientes deslumbrantes, ya que cuentan con un revestimiento en su superficie que les permite reflejar parte de la luz, impidiendo que esta llegue al ojo.

Para cada rostro

Triangular: Si tu tipo de rostro tiene forma de triángulo, es decir, cuentas con una barbilla muy fina y pronunciada y una frente amplia, las gafas de tipo aviador y con montura fina son tu mejor opción.

Cuadrado: Si tienes la cara con una forma cuadrada, lo mejor son modelos redondeados, de montura fina y mejor si optas por los tonos claros.

rectangular: Si tu rostro es parecido al cuadrado pero con una frente y una mandíbula más amplias, te servirán los mismos modelos que en el caso anterior, pero también con monturas altas.

Redondeado: Olvídate de las gafas de sol redondas y hazte con un modelo que alargue tu cara verticalmente, como las rectangulares, cib monturas gruesas y coloridas en modelos angulosos. Las gafas de estilo retro pueden ser unas de tus mejores aliadas.

Ovalado: Tienes el rostro perfecto según los cánones de belleza actuales por lo que puedes darte el capricho de ponerte cualquier tipo de gafas de sol.