La estafa encuentra un campo fértil en Latinoamérica, un territorio en el que (aparentemente) las malas experiencias no dejan ninguna enseñanza entre la población, que confía una y otra vez en ofrecimientos demasiado generosos sin pedir garantía alguna. Es el caso de la francesa madame Gilbert Van Erpe, quien estafó a mexicanos, chilenos y peruanos con el cuento del ‘hongo mágico’.

La millonaria estafa piramidal funcionaba así: Madame Gilbert convencía a sus ‘clientes’ (víctimas en realidad) para que compren por $450 un fermento de yogurt que ella vendía. Las compradoras confiaban en la oferta de una ganancia casi inmediata, ya que debían llevarse el fermento a casa, madurarlo con leche y, ya con los hongos listos, ‘revendérselos’ a Madame Gilbert, quien los utilizaría para producir cosméticos en Europa. El anzuelo apuntaba a la ambición y la codicia de la persona: la francesa ofrecía pagar $900 por esos ‘quesitos’, es decir, el doble de lo que invirtió el ‘cliente’ (mayormente mujeres).

Con este engaño, Madame Gilbert estafó a miles en Sudáfrica y Bélgica en la década de los ochenta. Las denuncias en su contra la empujaron a buscar nuevos ‘mercados’. Así llegó al continente americano en los noventas. Primera escala: Puerto Vallarta (México), a donde arribó haciéndose pasar por una millonaria mujer suiza. La Madame tenía seis pasaportes falsos con los cuales se movía con facilidad por el mundo. Pero ni eso evitó su caída. La policía la capturó y fue extraditada a Bélgica, donde cumplió una condena de cinco años de cárcel. Libre, la Madame decidió regresar a Latinoamérica, un ‘mercado’ propicio para sus actividades ilícitas. Segunda escala: Perú, año 2004, país en el que implementó una red de captación en varias provincias. Casi 3,000 peruanos fueron estafados. Con el negocio encaminado, la Madame hizo su tercera escala: Chile, el mismo año (2004). Más de 5,000 chilenos fueron estafados con el cuento del ‘yogurt mágico’. Pero las autoridades chilenas no permitieron que la francesa (que ya había retornado a su país a gozar de sus ganancias) se salga con la suya y presentaron una orden de captura internacional. Gilbert Van Erpe fue capturada en Niza en el 2008. Desde entonces está bajo custodia policial.

Madame Gilbert debió confrontar un proceso judicial en Francia hace un par de semanas, pero un supuesto derrame cerebral la libró del banquillo de los acusados. Al menos por un tiempo. Una nueva audiencia ha sido programada para el próximo 8 de junio, día en el que finalmente rendirá cuentas ante la justicia.

¿Se le hace familiar este embuste? Estafas de este tipo (o parecidas) también se dan en Texas y en todo Estados Unidos. El estafador sabe que la necesidad de dinero (y la ambición por ganarlo con el menor esfuerzo) es grande, por eso el ‘mercado’ nunca se agota. Sin embargo, la historia nos enseña que cuando algo parece demasiado bueno, probablemente no sea verdad. Y menos en los negocios.