Así como las damas quieren que los hombres las comprendan, las conozcan de punta a punta y sepan lo que les pasa por la mente, también debemos tener en cuenta ciertas cosas sobre los caballeros.

La mayoría de los hombres dice que las mujeres son sumamente complicadas y que son imposibles de entender. Sin embargo, resulta que las mujeres piensan también algo similar de los hombres.

Hay mujeres que creen que por el hecho de tener hermanos o amigos conocen todo por lo que un hombre pasa, siente o quiere, pero la realidad es que la mente y el cuerpo masculino pueden ser muy complejos.

¿Sabías que los hombres tienen un reloj biológico que con el tiempo se vuelve poco fiable? Después de los 30 años van perdiendo aproximadamente el 1% de la testosterona cada año.

En los hombres los cambios del envejecimiento se producen principalmente en los testículos: Disminuye el nivel de la hormona sexual masculina, la testosterona. Ésta les permite mantener la fuerza muscular, el deseo sexual, la producción de espermatozoides, el crecimiento del cabello y la distribución de la grasa corporal.

Ponemos al sexo masculino bajo los rayos X para tener una vista parcial:

El 85% de las mujeres están satisfechas con el tamaño del pene de su pareja, mientras que sólo el 55% de los hombres dice estar contento con el tamaño de su miembro. De éstos, el 63% confiesa que su ansiedad por el tema comenzó debido a comparaciones durante la niñez, mientras que el 37% asegura que fue por las imágenes pornográficas que vio durante su adolescencia.

Los hombres no tienen ningún interés en competir con las mujeres. De hecho, eso es exactamente lo primero que ellos ven cuando una mujer se acerca: definen si es una hembra ‘alfa’. Para un hombre esto en realidad no es nada atractivo ya que es como salir con otro hombre. La clave es aprender a complementar el poder masculino.

Los hombres gastan casi un año de su vida mirando a las mujeres.

Las mujeres parpadean 19 veces por minuto a comparación de los hombres que lo hacen 11 veces por minuto.

En promedio, si sumamos todo el tiempo que gastan rasurándose, un hombre pasa seis meses afeitándose en su vida.

Los hombres esperan ser respetados especialmente en público y en privado. Sobresalen cuando saben de su confianza y se les admira. Ellos quieren respeto más que amor. Si tú los respetas, ellos te respetarán. De acuerdo con el escritor Shaunti Feldhahn, los hombres prefieren soportar la pérdida de los sentimientos amorosos de sus parejas que perder su respeto.

Les encanta sacar su lado protector cuando una mujer realmente les importa.

Los hombres son tan sensibles como las mujeres. En este caso la sensibilidad al tacto. Dos estudios separados, uno en la Universidad de Cornell (para las mujeres) y la Universidad Estatal de Michigan (para los hombres) utilizaron un dispositivo que mide la presión que una persona puede sentir sobre su piel. Para los caballeros, las zonas más sensibles eran la punta del prepucio, y el área en la parte inferior del pene justo debajo del glande (llamado el frenillo). Pero de acuerdo a la escala de sensibilidad, los hombres y las mujeres estaban en un empate técnico. Ambos sexos responden a un mismo nivel de contacto: A tan sólo dos décimas de gramo de presión se podía sentir.

Como cualquier zona del cuerpo, la punta del pene alberga su propia colonia de bacterias, pero en los hombres no circuncidados las condiciones atmosféricas de esas bacterias son ideales para su sobrevivencia. Ellas pueden aumentar el riesgo de infección por VIH/Sida y otras enfermedades de transmisión sexual.