Los casos de niños prodigio en el deporte siempre resultan ser impredecibles: no sabemos cómo van a adaptarse al nivel profesional. En algunos casos destacan en competiciones infantiles y juveniles debido a una gran ventaja física (estatura, envergadura o velocidad), pero ya de adultos terminan siendo buenos jugadores, pero no las superestrellas que se esperaba.

Jaden Newman, es una niña de diez años que está revolucionando el básquetbol en este país. A su corta edad promedió 30.5 puntos por partido en la última temporada de su equipo de secundaria en el Downey Christian High School de Orlando (Florida). Jaden juega en el equipo femenino desde tercer grado y se enfrenta a rivales de más estatura, peso y hasta seis años mayores.

No se puede pronosticar algo definitivo sobre el futuro de Jaden. Lo cierto es que, dado sus registros y su habilidad y destreza con el balón, el portal deportivo www.bleacherreport.com advierte que esta jovencita podría convertirse en la primera mujer en jugar en la NBA.

¿Será posible? Según el portal www.Mundodeportivo.com, David Stern, ex comisionado de la NBA, aseguró en una entrevista a la revista Sport Ilustrated en 2008, que ver a una mujer jugando en la NBA es una posibilidad real y apuntó que se podría producir antes de 10 años.

El único caso del que se tiene registro en toda la historia de la NBA es el de Ann Meyers Drysdale, la mujer que en 1979 firmó un contrato profesional con los Indiana Pacers, pero fue despedida antes de que comenzara la temporada y después de participar en unos pocos entrenamientos de pretemporada del equipo.

Becky Hammons, una auténtica estrella de la WNBA, fue contratada como entrenadora asistente por Greg Popovich, de los San Antonio Spurs, uno de los técnicos más importantes de la NBA. Es la primera mujer que ejerce el cargo en la liga estadounidense de baloncesto profesional. ¿Podrá dirigir algún día un equipo? Puede ser.

Mujeres con posibilidades de participar en la NBA, ya sea desde el banco o en la pintura, dice mucho del avance de las mujeres en un deporte donde cada vez tienen más cabida. Como dijo Popovich tras contratar a Hammons: “No es una cuestión de género, de raza, ni nada de eso. Sólo es talento y capacidad para hacer las cosas”. AGENCIAS