El campeón semipesado de la UFC, Jon Jones, comenzó un programa de rehabilitación por consumo de cocaína tan solo días después de defender por octava ocasión su corona ante Daniel Cormier, en el UFC 182, a quien venció.

Esta decisión es consecuencia de haber dado positivo en un examen antidoping que le realizó la Comisión Atlética de Nevada (CAN) el pasado 4 de diciembre. ‘Bones’ dio positivo por benzoilecgonina, la cual es la metabolito principal de la cocaína. Sin embargo, la CAN se rige bajo el código de la Agencia Mundial Antidopaje, la cual no reconoce a la benzoilecgonina como una sustancia prohibida fuera de competencia.

Por este motivo no le pudieron impedir a Jon Jones pelear en el MGM Grand Arena de Las Vegas ante Daniel Cormier pero fue el propio luchador quien decidió

internarse. AGENCIAS