Es una de las bandas más vibrantes y energéticas del Centro de Texas. Matizz fusiona los ritmos latinos, combinando energía con música alegre y bailable. En su repertorio, lleno de versiones de exitosas canciones de artistas afamados, los espectadores encuentran una invitación a bailar al son de las armonías vocales de los cantantes, la guitarra, teclados y percusión.

La Banda Matizz está integrada por cinco artistas locales de mucho talento. La agrupación fue creada en 1998 en San Luis Potosí (México). Su líder y fundador es Ángel Reyes, músico encargado de la guitarra, los teclados y los coros. Junto a él destaca la voz de la sensual Raquel Reyes, quien también participa en la percusión y coros. El incansable Víctor Huaynalaya también es vocalista y percusionista, mientras David Arjon se encarga del bajo y Martín López destaca en la batería.

Hace dos años la banda comenzó a presentarse en el Centro de Texas y con frecuencia se presentan en el escenario del restaurante Morelia’s Mexican Grill de Round Rock y en Toro Negro Lounge de la Slaughter Lane. Asistir a uno de los conciertos en vivo de Matizz es garantía de diversión total y quien ha tenido la oportunidad de verlos en vivo saben que la noche ‘se prende’.

Ellos, talentosos y dedicados músicos, conversaron con EL MUNDO Newspaper sobre su carrera.

¿Por qué escogieron este nombre? Ángel: Matizz se debe al amor al arte en general, pero en especial a la música. Es el ‘feeling’ que uno le da a su instrumento o a su forma de cantar; esto incluye ofrecer diferentes dinámicas musicales en la interpretación de cada obra musical.

¿Qué los hace únicos? Víctor: la energía y versatilidad.

¿Creen que la comunidad de Austin apoya a las bandas locales como ustedes? Víctor: la gente latina apoya a las bandas y eso se agradece de corazón. Y no sólo la gente latina, los estadounidenses también disfrutan mucho de nuestra música a pesar de no entender la letra (risas). El ‘beat’ que marcan las canciones hace que se levanten y bailen.

¿Qué piensan de lo que ofrecen otras bandas locales? Raquel: Hay mucha oferta y muy buena. Simplemente nos da gusto ver cómo los músicos latinos se desenvuelven aquí en Austin, la Capital de la Música en Vivo.

¿Cuáles son los grandes obstáculos de las bandas locales? Martín: En Austin hay muchos lugares para tocar y exponer la música, desafortunadamente en la mayoría de estos lugares el músico no recibe la recompensa monetaria real.

¿Qué opinión tienen de la fama? Raquel: Cuando la conozcamos podríamos opinar (risas).

¿Qué es lo que más disfrutan de una ‘tocada’? Raquel: Estar cerca de la gente y verla feliz disfrutando de nuestra música. Víctor: Todo lo que te rodea. Es una carga de energía que sueltas y son sentimientos que me pasaría horas explicando, pero lo más importante son ustedes, el público, ya que sin ustedes no existiríamos. Ver que disfrutan, para mí, no tiene precio.

Ángel: Son muchas cosas, tanto el buen sonido del equipo, la acústica del lugar, el ambiente y la buena energía entre la banda y el público.

Martín: La cerveza y el ritmo (risas).

¿Y qué es lo que menos disfrutan? Víctor: Guardar los equipos después de cada show (risas). David: Cuando no hay ambiente. Martín: Cuando se acaba el baile.

¿Qué recomendación le darían a quienes se están iniciando en el mundo de la música? Víctor: A todos mis amigos les deseo la mayor de las suertes. No es fácil. Hay mucha competencia y como dije antes, existe lo bueno y lo malo en este mundo. Se necesita mucha dedicación, perseverancia, mucho empuje y sobre todo profesionalismo; sólo así saldrán adelante. Y sean agradecidos con su público, que es lo más importante en la vida de un artista. David: Lo que yo les recomiendo a las bandas nuevas es que le echen muchas ganas. Que disfruten sus ‘tocadas’, ya que hay altas y bajas en este negocio.