La jornada cinco registró cuatro empates y cinco victorias, de las cuales la del León sobre Pumas es la más llamativa por la cantidad de goles que el equipo de Guanajuato le encajó a los universitarios en su casa. Quizá la victoria de León, la primera del torneo, sirva como impulso para un mejor desenvolvimiento en lo que queda del torneo.

Ganar –y otros resultados favorables– impulsaron a ‘La Fiera’ hasta la onceava posición, alejándose rápidamente de los últimos puestos. La grata sorpresa de esta parte del campeonato es la recuperación gradual del Cruz Azul, que gana con lo justo pero gana, que es lo importante. ‘La Máquina’ aún no pierde un encuentro y hasta se ha dado el lujo de marcar un récord en el fútbol mexicano: no recibir un gol en 450 minutos, un registro que antes tuvo el Toluca. Ganar sin contundencia le pasará factura al Cruz Azul, especialmente si desea inscribirse en la Liguilla de este torneo corto.

Si el equipo no trabaja en mejorar su juego y ser más eficientes en la línea de ataque, las derrotas están próximas. Por su parte, el Guadalajara perdió nuevamente y retrocedió posiciones. Se podrá decir que el tanto de Santos fue marcado en posición adelantada pero no se trata de justificar decisiones arbitrales cuestionables ni culpar a nadie: si el equipo no mejora, si no procura ejercer fútbol de presión, con entrega y acierto en los pases, la hecatombe es un hecho.

Casi la misma historia, la del equipo irregular que no sabe mantener resultados es el América.

El empate ante el colista Monarcas fue demasiado premio para los locales y un castigo para el equipo de Coapa. Poco a poco ceden posiciones en la tabla y la única responsabilidad es de los jugadores. Pachuca no presenta signos de cambio y sigue su errático campeonato, empatando en esta ocasión en casa ante el Toluca que le sirve para colocarse con 5 puntos en el puesto 15 y pudiendo ser superado por los Leones Negros que aún se encuentran pendientes de disputar su partido. Continúan los problemas financieros para Jaguares, que aún no se ponen al día con las deudas que tiene con su plantel y cuerpo técnico, dejando en evidencia el falso argumento de que los clubs de la Liga MX gozan de buena salud financiera.

Si el pasado año fueron los Gallos Blancos quienes se vieron inmersos en graves problemas financieros, lo que les llevó al cambio de dueño, este año es Chiapas quien los sufre. Para desmedro del fútbol profesional mexicano.