Hasta el 3 de septiembre, el Departamento de Policía de Austin (APD) estará ejecutando un operativo ‘No-refusal’ o ‘sin resistencia’, para combatir a conductores que suben a sus coches bajo la influencia del alcohol o las drogas.

‘Sin resistencia’ quiere decir que si un oficial sospecha que un ciudadano está bajo la influencia del alcohol y éste se niega a una prueba de aliento, el oficial puede solicitar una orden de un juez para efectuar una prueba de sangre que determine el nivel de alcohol en la sangre.

Es un delito mayor conducir con niveles de alcohol de .15 en la sangre y quienes sean detenidos bajo estas circunstancias enfrentan una pena de hasta un año en la cárcel y una multa de $4 mil, si es su primera ofensa.