La infertilidad y las latinas: lo que necesitas saber
Dr. Helen Troncoso | 4/15/2015, 8 a.m.
La infertilidad no es algo de lo que se habla lo suficiente entre las mujeres, probablemente mucho menos entre las latinas– quienes, según varias representaciones en los medios injustas, somos de fertilidad ilimitada.
La infertilidad es definida como la incapacidad de lograr un embarazo después de doce meses o más de tener relaciones sexuales sin protección.
Las tasas de fertilidad han bajado a nivel mundial para todos los grupos étnicos, principales de mujeres y especialmente mujeres latinas– lo cual es debido a las tasas de desempleo y también a retrasar el tener hijos debido a estudios o carrera.
Aquí hay otros datos para que estés consciente sin importar tu edad y ayudarte a prevenir cualquier potencial infertilidad.
Tenemos mayor probabilidad de tener tratamientos de fertilidad menos exitosos
El periódico Fertility and Sterility publicó un estudio evaluando diferencias étnicas y raciales en los tratamientos de fertilidad. Los resultados indican que – a comparación a las mujeres caucásicas – las mujeres latinas tienen un 13 por ciento menor de probabilidad de tener partos exitosos después de un tratamiento.
Sin embargo, debido a que las latinas seguimos siendo un porcentaje pequeño de las pacientes en programas de fertilización in-vitro (IVF, por sus siglas en inglés), se necesita más investigación para sacar conclusiones finales.
Naciste con todos los óvulos que vas a tener en toda tu vida.
A diferencia de los hombres, quienes producen esperma nuevo durante el transcurso de sus vidas, las mujeres nacen con todos los óvulos que tendrán– lo cual es aproximadamente 2 millones.
Las mujeres llegan a la adolescencia con trecientos a cuatrocientos mil óvulos, con unos mil óvulos que mueren cada mes. Cuando ya no hay más óvulos, los ovarios dejan de producir la hormona estrógeno, y comienza la menopausia.
La ovulación y cómo llevar un registro
La ovulación es la liberación de un óvulo de tus ovarios, y la precursora a quedar embarazada.
Eres más fértil desde dos a tres días antes de la ovulación y durante ella. Si tienes un ciclo promedio de 28 días, en donde el día uno es el de tu período, y el 28 es el último día antes de tu próximo período, el día 14 es cuando vas a ovular.
Otras maneras de medirla incluyen el tomar tu temperatura basal del cuerpo (BBT, por sus siglas en inglés). La BBT se toma cada mañana, y aunque no lo notes, tu temperatura sube algunos días después de ovular.
Hay una aplicación gratuita excelente, llamada Menstrual Calendar, que puede ayudarte a llevar un registro de tu período y predecir cuándo vas a ovular, lo cual es útil para quienes no tienen un ciclo promedio de 28 días.
Los hábitos alimenticios y de estilo de vida pueden afectar tu fertilidad
Tener sobrepeso o tener menos peso que el adecuado pueden afectar tu producción de hormonas e inhibir la producción de óvulos, según Mayo Clinic. Una dieta saludable y no restrictiva es lo mejor, junto con seguir una rutina de ejercicios moderada durante por lo menos 30 minutos al día, 4 días a la semana.
También protegerás tu fertilidad (y salud en sentido general) al no fumar, limitar el tomar alcohol en exceso y un alto consumo de cafeína.
Asegurarte que el ambiente de tu hogar tenga bajos niveles de toxinas puede ayudar a mejorar tus oportunidades. Esto significa fijarte en el tipo de limpiadores, detergentes, pesticidas, e incluso la pintura de las paredes.
Piensa en los productos que estás usando en tu piel, el órgano más grande de tu cuerpo, y lo que absorbe a diario.
Aunque puede no ser realista el pretender borrar todas las toxinas completamente, hay mucho que podemos hacer para minimizar nuestros riesgos.
Tu riesgo para enfermedad genética aumenta con la edad
La Sociedad Americana para Medicina Reproductiva (ASRM, por sus siglas en inglés) afirma que los defectos de nacimiento que van desde muy simples a severos ocurren en uno de cada veinte embarazos.
El trastorno genético más común es el síndrome de Down, el cual es causado por un cromosoma extra que causa discapacidades intelectuales y físicas. La ARSM recomienda realizarse exámenes genéticos para mujeres de 35 años de edad en adelante.