El Departamento de Estado recomendaría a la Casa Blanca retirar a la isla de la lista de países acusados de apoyar al terrorismo para mejorar relaciones bilaterales. La presencia de Cuba en la lista estadounidense es un obstáculo importante en los esfuerzos por restaurar las relaciones y reabrir embajadas. Las razones de Washington para mantener hasta ahora a Cuba en la lista apuntan a su presunta acogida de miembros del grupo separatista vasco ETA y de las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), además de algunos fugitivos de la justicia estadounidense. Cuba integra desde 1982 la lista estadounidense que se renueva cada año, lo que supone la imposición de sanciones como la prohibición de venta y exportación de armas, vetos de ayuda económica y restricciones a las transacciones financieras entre ciudadanos. AGENCIAS