A lo largo del embarazo el cuerpo de la mujer va modificando la posición de sus órganos y estructuras óseas, creando así un nuevo lugar para poder alojar al bebé que se gestará durante nueve meses. Estas modificaciones llegan a ocasionar molestias típicas a la futura mamá como son dolor de espalda y cansancio.

La pelvis se convierte en la cuna el bebé que irá a nacer, por lo que la musculatura pélvica y abdominal trabajaran conjuntamente para crear un espacio cómodo y confortable, convirtiéndose en el canal de sostén y salida del bebé. El yoga te ayudará a mantener la conciencia corporal a lo largo de su práctica. Potenciará el trabajo de los músculos que envuelven la cintura pélvica ya que estos serán los más afectados durante y después del embarazo.

Practicar yoga puede convertirse en un ejercicio adecuado para las mujeres que no practican asiduamente ninguna actividad física. Es una actividad completa, donde trabajarás respiración, elasticidad y relajación al igual que conectarás contigo misma y el bebé que llevas en tu interior otorgándote la facilidad de poder adaptarte a los cambios internos y externos de manera exitosa, creando conciencia de tu cuerpo, mente y espíritu.

¿Por qué yoga?

Al trabajar cuerpo, mente y espíritu, la mujer experimenta mayor conciencia de si misma, descubriendo la capacidad de adaptarse a los cambios internos ya que se darán modificaciones físicas y hormonales que desequilibran su postura y estado de ánimo. En muchas ocasiones aparecen miedos por el nuevo nacimiento, acerca de la maternidad y de cómo será su nueva etapa como madre. Es importante que todos estos cambios se vivan de una forma positiva y tranquila, por ello el yoga aportará la serenidad y relajación suficiente a través de meditación y diferentes posturas para que el cuerpo se conecte y cree un espacio de equilibrio para ella y la vida que crece en su interior.

La respiración automática y regular es uno de los puntos principales a trabajar en esta disciplina. Ayudará a mejorar la postura, aliviando posibles dolores musculares y molestias normales que se dan durante el embarazo.

Como mujer el yoga prenatal apoyará a tu trabajo de parto y durante el tercer trimestre. Tener conciencia de la musculatura de tu suelo pélvico y abdomen creará un escenario perfecto para fortalecer dichos músculos lo cual es imprescindible a la hora de ayudar y pujar en las etapas del parto.

Aventúrate a conocer todo lo positivo que te ofrece el yoga durante el embarazo, notarás desde el primer momento cambios y múltiples beneficios ya que son innumerables. El yoga aportará a ti y tu bebé sentimientos de plenitud y aprenderás habilidades sagradas para empezar el presente. Escucharte a ti misma será el mejor sonido que puedas vivir.

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