La Corte Suprema del país autorizó a la Administración Trump establecer nuevas reglas que podrían poner en peligro el estatus de residente permanente para los inmigrantes que usan cupones de alimentos, Medicaid y vales de vivienda. Con la venia del mayor estamento de justicia del país, los funcionarios de inmigración podrán denegar la tarjeta verde (‘green card’) a los inmigrantes indocumentados que recurran a la ayuda pública.

Las demandas respecto de este tema continuarán, pero ahora los inmigrantes que soliciten la residencia permanente deben demostrar que no serán una carga para el país. La nueva política migratoria amplía significativamente los factores que se considerarían para tomar esa determinación, y si se decide que los inmigrantes podrían convertirse en una carga pública en el futuro inmediato, esa residencia legal podría ser denegada.

EL DATO

Aproximadamente 544 mil personas solicitan tarjetas verdes anualmente, de las cuales 382,000 se encuentran en una situación que haría necesaria la revisión de sus casos.