Millonario gasto por mantener a cuarenta presos en Guantánamo


Agencias / Cortesía | 9/26/2019, midnight
Millonario gasto por mantener a cuarenta presos en Guantánamo
CONDICIONES. El limbo legal en el que se encuentran los presos de Guantánamo no les permite siquiera que sean trasladados a territorio de Estados Unidos ni siquiera en caso de una emergencia sanitaria. |

Cerca de una bahía en el oriente de Cuba, el Gobierno Federal mantiene el último reducto de las cárceles secretas que creó por todo el mundo en la ‘guerra contra el terror’: el centro de detención de Guantánamo. Son solo cuarenta presos, todos musulmanes. La mayoría de ellos lleva más de quince años allí, bajo el calor sofocante del trópico.

En algún momento, esa controvertida prisión albergó más de setecientos reos, pero ahora solo queda un puñado de hombres. Sin embargo, a medida que pasan los años, el país gasta más y más dinero en ellos.

En el 2013, cuando había 166 presos, el costo anual para operar el sistema penitenciario y judicial de Guantánamo era de 454 millones de dólares, según el Departamento de Defensa (DoD), lo que implicaba un gasto anual de unos 2.7 millones por cada preso. En el 2018, cuando solo quedaba la cuarta parte de los que estaban allí en el 2013, el gasto anual rondó los 540 millones, lo que implicó alrededor de 13.5 millones por reo al año.

De acuerdo con datos del DoD, Washington ha gastado más de 6,000 millones desde la apertura de la cárcel hace dieciocho años, lo que implica un gasto promedio de 380 millones por año. Esta es, según la prensa de este país y las organizaciones de derechos humanos, la cárcel más cara del mundo.

EL DATO

Según los últimos datos del DoD, alrededor de trescientos contratistas trabajan en la prisión, entre ellos, lingüistas, traductores, analistas de inteligencia, consultores o expertos en tecnologías. Sin contar los funcionarios de las agencias de inteligencia (cuya presencia en Guantánamo es información clasificada), se calcula que hay más de 2,100 personas trabajando para 40 reos, entre militares y empleados civiles.