El número de hispanos que votaron en las elecciones de noviembre pasado en Texas aumentó casi 30% respecto del 2012, y rebasó el aumento de electores de otros grupos, de acuerdo con un informe estatal. La proporción de electores con apellido hispano aumentó de 17.2% en 2012 a 19.4% en 2016, según estadísticas del Consejo Legislativo de Texas. Los hispanos conforman el 38% de la población de Texas, pero tienden a acudir a las urnas en tasas menores que otros grupos en Texas o los latinos en otros Estados de la Unión. Sin embargo, este incremento podría ser un indicio de que cualquier proceso electoral futuro será cada vez más reñido en territorio texano.