Transporte público en la mira


Residentes votarán en noviembre por la construcción de una nueva línea del metro en el centro de la ciudad

Tania Del Ángel Pich | 6/16/2016, 6 a.m.
Transporte público en la mira

En las elecciones del 8 de noviembre, además de elegir al nuevo presidente o presidenta del país, los residentes de Austin tendrán la opción de votar por la construcción de una línea de tren ligero urbano que correría a lo largo de las calles Guadalupe y Lamar norte, con un total de 5.3 millas de riel.

Las autoridades del Central Austin Community Development Corporation (CACDC), entidad a cargo del proyecto, confía que esta propuesta sea aceptada por los residentes de la capital de Texas. “La construcción del tren estaría ubicada en la zona centro más poblada de la ciudad, donde se localiza un gran número de viviendas, un sinnúmero de trabajos y donde gran parte de la comunidad carece de automóviles, todo lo cual hace del transporte público el principal medio de traslado de la gente”, asegura Gabriel Rojas, comisionado del CACDC.

Sin embargo, esta será la tercera vez que se votará por la construcción de un tren urbano. La más reciente consulta se hizo el año pasado (2014). “Hemos llegado a un punto en donde ya no se puede construir más avenidas para movilizar el tráfico en Austin. Necesitamos crear espacios y calles seguras para que la gente pueda caminar y trasladarse en bicicleta libremente”, dice Rojas.

TESTIMONIO

Para Hugo Ramírez, residente del centro de Austin, que se materialice esta propuesta significaría un gran ahorro de tiempo y combustible: “Aunque mi trabajo está muy al norte de Austin, mi casa está ceca de la calle Lamar, lo que me permitirá dejar mi coche en casa y trasladarme en metro por las noches y los fines de semana. Será de gran ayuda y evitaría un poco el terrible tráfico de la ciudad”.

Según el CACDC, el proyecto tendría un costo aproximado de $398 millones, mucho más económico que la última propuesta (denegada) de mil millones por 9.5 millas de ferrocarril urbano. Además, el plan señala que no se pedirá ayuda económica al Gobierno Federal, lo que agilizaría el desarrollo de la construcción. “La nueva propuesta de tren ligero podría transportar hasta 37 mil 500 personas por día, casi diez veces más que la línea roja del metro actual dirigida por Capital Metro. La primera fase estaría terminada dentro de tres o cuatro años y se construiría con fondos locales”, explica Rojas.

Futuras extensiones

Si se consiguen los votos requeridos, comenzaría la construcción de la primera fase; sin embargo, en el mediano plazo se buscaría la expansión del tren urbano, que recorrería el largo y ancho de toda la ciudad capital. La segunda fase consistiría en habilitar 5.5 millas de rieles, que conectarían la 1st. St. y la Riverside Dr. con una terminal en el sur de la MoPac y la Hwy. 71. Con la tercera fase, los rieles llegarían al Austin–Bergstrom International Airport, cubriendo 4.3 millas desde el sur de la Pleasant Valley y Todd Ln. Finalmente, la cuarta y última fase conectaría las líneas verdes, comunicando el este y el oeste de la ciudad.

“Las elecciones presidenciales atraen a muchos votantes por lo que no podemos desaprovechar esta gran oportunidad para que la comunidad de Austin vote por un cambio positivo en el transporte público urbano de la ciudad. Hacemos un llamado al Austin Council City y a los políticos para que escuchen y permitan que los residentes elijan en noviembre, por sí mismos, los cambios que consideren necesarios”, concluye el Gabriel Rojas.