Ser mejor amante


2/5/2015, midnight
Ser mejor amante

Aunque no lo digamos en voz alta, mucho nos preocupa saber qué tan buenos somos en la cama y constantemente buscamos las formas de mejorar nuestro desempeño.

Muchos especialistas te dirán que la clave está en prestar atención a lo que ella quiere, lo que le gusta, y dedicar especial tiempo y esfuerzo en esa zona o movimiento especial.

De seguro, prestando atención y dedicándote a satisfacerla conseguirás gemidos y gritos, siendo el amante perfecto. Pero, si además estás buscando incrementar tu duración en la cama o conseguir la capacidad de ser multiorgásmico, la revista digital publinews.com entrevistó a la experta en sexualidad Alessandra Rampolla para crear los cuatro consejos claves.

Controla la tensión sexual: La cadena de la tensión sexual en un acto sexual “normal” es siempre ascendente, pero debes aprender a manejar esa tensión para prolongar el desenlace o clímax. Realiza series de ejercidos de masturbación extensa, para controlar tus niveles de excitación y prolongarlos.

La respiración importa: La respiración es clave en la capacidad multiorgásmica de un hombre, ya que juega un papel importante en la excitación. Cuando sientas que se aproxima el reflejo evacuatorio debes respirar profundamente y mediante a la respiración controlar el ritmo cardiaco. Para esto, asegúrate de respirar de manera correcta: inhala por la nariz e intenta que el oxígeno “llegue” hasta el viente; y expira hasta que el pene y los testículos se levanten levemente.

Presión en puntos claves: Hay tres puntos en el pene que permiten “controlar” la eyaculación: debajo del glande, alrededor de la base del pene y en el perineo. Presionar estos puntos ayuda a retrasar la eyaculación.

Control de la eyaculación: Los ejercicios Kegel ayudan a fortalecer los músculos pubocoxígeos, y lo mejor de todo es que sólo requieres cinco minutos al día y que los puedes hacer incluso mientras conduces o trabajas. Se trata de contraer dichos músculos, como cuando intentas detener la orina. Realiza varias series de contracciones, intentando mantener “mas contraídos” los músculos por más tiempo. Practica estos mismos ejercicios durante el acto sexual. Verás que lograrás interrumpir o retrasar la eyaculación, aún cuando haz alcanzado el orgasmo. AGENCIAS