Tal vez quieras que tu cabello se vea más vigoroso o quizás tengas interés en recuperarlo tras un tiempo de descuidarlo. Una parte fundamental es la alimentación. Come muchas frutas, vegetales, carnes y pescado. Tu dieta diaria parecería no estar en absoluto relacionada con tu cabello, pero ayuda a tu pelo a crecer más sano y vigoroso.

Dado que el pelo está hecho de proteínas, asegúrate de que incorporas a tu dieta suficiente de ellas. Las personas que sufren de anorexia nerviosa o aquellas que comienzan programas de pérdida de peso abruptas, experimentarán falta de crecimiento de su cabello.

Algunas proteínas que podrías incorporar a tu dieta son: carnes magras, como pollo o pavo, pescado, huevo, derivados de la soja, frijoles y nueces. Estos alimentos te ayudarán a favorecer la producción de queratina, la proteína encargada de hacer crecer tu cabello.

Consumir grasas con moderación te ayuda a mantener saludable tu cabello y regenerar las células de la piel. Las grasas te ayudarán a procesar las vitaminas (A, D, E y K) y minerales de tu dieta, necesarios para el crecimiento de tu cabello. Las grasas saturadas, las trans y las hidrogenadas son el tipo de grasas que debes evitar.

Las pastillas del complejo vitamínico “B” son útiles para favorecer el crecimiento de tus folículos capilares. Asegúrate de consumir suficiente hierro y zinc, que son esenciales para la producción de un buen y saludable cabello.

Tu cuerpo utiliza vitamina C para generar colágeno, así que también debes incluirlo.

Consejos para reducir los daños del cabello

1. Un exceso de peluquería puede lastimar tu pelo. Por más que se vea fantástico, no es lo mejor. Algunos químicos pueden afinar o lastimar tu cabello, e incluso causar la caída del cabello si son mal utilizados.

2. Peinar tu cabello de determinadas maneras o utilizando ciertos productos puede hacer que la caída sea todavía peor.

3. Evita hacerte la permanente o rizarte el cabello, alisártelo con plancha de cabello o con productos químicos, desteñirlo o teñirlo. Estos procesos pueden provocar serios daños a tu cabello, alterando la composición natural del mismo.

4. Excesivo calor, prevenga éste del secador o la plancha de cabello, puede quemar tu cabellera. Es mejor intentar secarlo a mano siempre que sea posible.

5. Cepíllate y péinate con cuidado. Un viejo mito que circulaba sostenía que cepillarse 100 veces al día ayudaba al crecimiento del cabello. Esto no sólo es falso, sino que también contraproducente ya que puede arrancar el cabello del cuero cabelludo.

6. Péinate cuando el cabello está seco. Cuando está mojado, tu pelo está vulnerable. Es mejor esperar hasta que esté más seco antes de forzarlo en un peinado. No intentes desenredarlo sin la ayuda del algún producto desenredante.

7. No uses elásticos de pelo de goma para peinarte o sujetar el pelo. Si necesitas peinarte o sujetar el pelo hazlo con un gomita de tela o broche. De esta manera, evitarás que el pelo quede atorado en las puntas y podrás sujetarlo desde la raíz.

8. En condiciones normales, el pelo crece media pulgada. La mayoría de los estilistas recomiendan cortar el cabello cada 6 a 10 semanas, lo que significa que si lo cortas entre un cuarto y media pulgada crecerá más.

9. Mezcla la pulpa de tres hojas de aloe con miel y aplica la sustancia en tu cuero cabelludo. Espera 20 minutos y enjuágalo. Este es un consejo casero que, aunque no se ha comprobado científicamente, muchos aseguran es beneficioso.