Cada vez que siento que me estoy resfriando, me sumerjo en una tina de ajo y/o cebollas. No es lo mejor para mi vida sexual, pero definitivamente parece que ayuda a cortar de raíz mi enfermedad.

Según WebMD, un diente de ajo contiene 5 mg de calcio, 12 mg de potasio y más de 100 compuestos sulfúricos. Es antibacteriano y se usaba durante los tiempos de guerra para combatir la gangrena.

Consumir el ajo y las cebollas crudos es lo más efectivo, pero no muy sabroso. Intento cocinar con ellos durante todo el invierno, especialmente durante la temporada del resfriado y la gripe para mantener mi sistema inmunológico súper preparado.

Prueba mis verduras asadas para curar el resfriado y la gripe. Son fáciles de preparar y muy sabrosas. Los tres ingredientes claves son el ajo, las cebollas y los chalotes. No dudes en experimentar añadiendo y cambiando otras verduras.

Ingredientes:

2 chalotes

1 cebolla blanca

1 diente de ajo

1 libra de papas tipo fingerling

1 coliflor

Aceite de olive, sal y pimienta

Corta todas las verduras en trozos gruesos y mézclalas con aceite de olive, sal y pimienta. Cocínalas en una bandeja de vidrio a 375 F por 30 minutos o hasta que las verduras estén doradas y las cebollas caramelizadas, (deben pegarse al fondo de la bandeja. Esa es la mejor parte).

Deja enfriarlas por algunos minutos y sazona con más sal y pimienta si es necesario.